Tengo un mal sábado y el domingo no estoy en uno de mis
mejores momentos. La mañana ha empezado muy pronto y cuando son las once le
digo a Marisol si le importa que vuelva a ver esta película. Dice que no, que
ella prefiere quedarse en casa, así que saco a la Kida, voy a comprar un pollo
para la comida y me voy en las alas de la memoria recreándome en lo que veré. Y
esta vez en versión original.
Este visionado, ya lo puedo decir así, pues intento
fijarme más en la propia película que en lo que les sucede a los personajes, lo
disfruto más que la primera vez que la vi, pues aprecio detalles que se me
pasaron por alto y, con el conocimiento de lo que va a pasar, presto atención a
las miradas o a otros detalles que no es fácil en una película musical, por la
música o la coreografía. Y vuelvo a disfrutar, vuelvo a sentir la magia de esta
película en su arranque, en su sencilla pero entrañable historia, en sus
canciones. Es el séptimo arte en estado puro.
Dirección: Damien Chazelle Fotografía:
Linus Sandgren
Guion: Damien Chazelle Montaje:
Tom Cross
Música: Justin Hurwitz
Actores: Ryan Gosling, Emma
Stone, John Legend, J.K. Simmons, Rosemarie DeWitt
(2017; 128’; ***; 15)
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