Tanto Marisol como yo hemos leído una novela negra titulada 1280 almas de la que hablé en https://autobiografialectora.blogspot.com/2016/02/jim-thompson-1280-animes.html y, al ver que aparecía entre los títulos que ofrece Filmin no dudamos en ponerla, pues es muy buena… la novela, la película la dejamos al cuarto de hora y esperamos demasiado. Punto.
Al salir de la emisión anterior vimos el anuncio de esta
película, cuyo libro mereció una mala nota pero cuyo autor me entretuvo un
verano de los ochenta y, además, se trata de la última película de Hoffmann,
por lo que nos pusimos a verla hasta el final, quizá porque ya había gastado la
calabaza de la semana.
Evidentemente no me acordaba de la lectura de esta novela
diez años atrás, pero es la clásica de enredos de espías que, si no eres un
avezado espectador, te pierdes en la maraña de asuntos que trata la historia,
sin que encuentres uno que te atraiga lo suficiente. La acabamos por los
actores, que no por el guion.
El heredero de un millonario ruso que obtuvo su riqueza
con fraudes y delitos, renuncia a su herencia, pero quiere que las autoridades
alemanas lo protejan de los rusos que, según él, lo han torturado has casi
matarlo. Por en medio, otra sección alemana y lo sempiternos norteamericanos.
Dirección: Anton Corbijn
Fotografía:
Benoît Delhomme
Guion: Andrew Bowell,
Montaje: Claire Simpson
Música:
Herbert Grönemeyer
Actores: Philip S. Hoffman,
Rachel McAdams, Willem Dafoe, Robrin Wright, Daniel Brühl, Mehdi Dehbi
Plataforma: Filmin
(2014; 122’; **; 67)
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