sábado, 1 de febrero de 2020

LOS DOS PAPAS


Ver otra película de estreno por televisión, con actuaciones lo suficientemente buenas como para que estén nominados los dos actores que no abandonan la pantalla y, además, el guion, todavía me sorprende, pero así es la cadena Netflix (que no sé lo que durará si no tiene sus buenos ingresos).
Casi se podría decir que no ha sido la televisión la que ha acabado con los cines, sino el propio cine, pues, en un futuro no muy lejano, ¿quién irá a los cines para ver una película cuando podrá verla en su casa? Ya sé la respuesta obvia: los adolescentes y los que quieran ver superproducciones, pero de eso no vivirán las salas ya que ahora ya solo malviven. A mí, que me gustaba mucho ir al cine, ahora cada vez me cuesta más y tengo que ir a salas marginales a ver películas de las que llamábamos “de arte y ensayo”, pero restringiendo mi demanda voy afinando el tiro y el pasado año solo me parecieron malas una más de la media docena, de las cincuenta y seis que he llegado a ver.
Voy al fondo de la cuestión, es decir, la película: a mí me ha gustado, aunque no es sobresaliente, pero creo que cuando parece que te abren la puerta a algo medianamente desconocido (lo es del todo, pero creemos que sabemos algo) por poco que te interese te atrapa, como así ha sido. La película arranca con el fallecimiento de Juan Pablo II y el cónclave en el que se eligió al cardenal Ratzinger. Unos años más tarde Benedicto XVI llama al Vaticano a un cardenal singular para meterlo en cintura, pero este cardenal le sale con algo que no se lo espera y ahí comienza un tira y afloja y una relación que los lleva a tener que entenderse, aunque no opinen igual.
Las actuaciones son muy buenas, las caracterizaciones también y los lugares donde se ha rodado (verdaderos o falsos) espectaculares, pero que nadie se llame a engaño: es como una obra de teatro escrita para dos actores.





Dirección: Fernando Meirelles                                                    Fotografía: César Charlone
Guion: Anthony McCarten
Montaje: Fernando Stutz                                                             Música: Bryce Dessner
Actores: Anthony Hopkins, Jonathan Pryce, Juan Minujín, Luis Gnecco, Cristina Banegas
(2019; 126’; **; 56)


1 comentario:

  1. A mí me pareció una película bien rodada y muy bien interpretada que contaba cosas o que ya sabía o carentes de un gran interés. Si la terminé es que me entretenía, pero no diría más.

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