domingo, 26 de abril de 2020

EL HOMBRE QUE DISEÑO ESPAÑA


Marisol se da de alta en Filmin, un pésimo sistema para ello y peor para saber si te has dado finalmente, pero navegamos por sus ofertas y descubrimos el documental de este título. ¿Alguien que ha diseñado España? ¿Qué quiere decir esto?
José M. Cruz Novillo fue el diseñador de: logotipos (Correos, Renfe, Psoe, Policía Nacional, Endesa, Repsol, La Cope, El Mundo, Antena 3); imágenes institucionales (los billetes durante seis años, bandera de la Comunidad de Madrid); carteles de películas (El Sur, La escopeta nacional, Cría cuervos y una infinidad más); y otras creaciones artísticas que se escapan de este mísero párrafo.
En resumen, sí, puede decirse, y todo aquel que vea el documental comprobará, que este hombre salido de un pueblo de Cuenca se ha ganado con todo derecho el mencionado título. Aunque no se sea un entusiasta del diseño, con que tenga cincuenta años recordará con esta producción lo que ya he mencionado yo en alguna otra ocasión (España era en blanco y negro) y podrá apreciar lo que este diseñador hizo porque apareciera el color en nuestras vidas. Marisol y yo lo hemos disfrutado enormemente, por recordar lo que vivimos y por asombrarnos de lo que puede hacer una sola persona, cuando esta tiene las capacidades oportunas.






Dirección: Andrea G, Bermejo, Miguel Larraya                          Fotografía: Enrique Silguero
Guion: Andrea G, Bermejo, Miguel Larraya
Montaje: Miguel Larraya                                                             Música: Nus Cuevas
Actores: Cruz Novillo, Alfonso Guerra, Juaquín Leguina, Rafa Celda
(2019; 81’; ***; 16)


sábado, 25 de abril de 2020

UNORTHODOX


Tanto Daniela como Hevila me aconsejan esta serie, así que cuando terminamos otra que me he saltado comentarla, la vemos. Solo la presentación de la situación, antes de los títulos de crédito, ya te deja traspuesto, sin que haya tiros ni sangre, ni violencia, pero ya ves que a ti no te gustaría estar en la piel de la protagonista. Vimos dos capítulos de un tirón y dos días más tarde hemos dado con ella. Me ha gustado mucho cómo trata el contexto de los mundos que presenta, sin enjuiciarlos, solo mostrando cómo son.
Estamos en Nueva York, en una comunidad ortodoxa judía, y la protagonista es una joven de unos veinte años. Los hombres van con levitas oscuras y camisas blancas muy elaboradas, además de largos aladares formando bucles. Las mujeres con ropas casi talares de colores más bien oscuros y con el cabello muy similar. Vemos un par de escenas en las que el rigor de la disciplina a ella le desasosiega. Tanto es así, que tal y como ya he dicho en el párrafo anterior, el espectador pasa a encontrarse en medio de la escena y sentir una cierta opresión.
Y de opresión quiero terminar hablando. Para mí hay de dos tipos, la física y la intelectual o psicológica. La primera está condenada por la ley, es decir, no está permitido retener a nadie en contra de su voluntad. La segunda está permitida para todas las religiones, doctrinas y todo aquello que no haya sido condenado explícitamente, como las sectas que, habitualmente incluyen la primera opresión; por eso, esta segunda forma de limitar la libertad me parece execrable y, para mí, todas las religiones, en mayor o menor medida, obligan a sus acólitos a cumplir con sus normativas y, si estas son laxas está en las manos de cada uno cumplirlas o no, pero cuando son rígidas las capas desprotegidas (jóvenes o iletrados o sin suficientes medios para subsistir) no tienen forma de evadirse de la opresión. Y de eso trata esta muy recomendable serie.






Dirección: Maria Schrader                                                    Fotografía: Wolfgang Thaler
Guion: Deborah Feldman, Daniel Hendler, Alexa Karolinski, Anna Winger
Montaje: Hansjörg Weissbrich, Gesa Jäger                          Música: Antonio Gambale
Actores: Shira Haas, Amit Rahav, Jeff Wilbusch, Alex Reid, Ronit Asheri, Delia Mayer
(2020; 4 x 53’; ***; 15)


domingo, 19 de abril de 2020

EL HOYO


Durante la entrega de los premios Goya escuché en varias ocasiones el título de esta película, pues estaba nominada a tres y ganó el de Efectos especiales, y algo así como que era desasosegante. Ahora hace un par de semanas, Anna me insistía en que la viera y anteayer Eva me la aconsejó, aunque me dijo que Marisol no la vería, como así fue. En resumen: no es para estómagos delicados, ni exquisitos, ni escrupulosos; pero está muy bien hecha, tiene intriga, un buen guion y una notable dirección, a pesar de ser novel (qué diferencia con llevar la cámara a cuestas, sino saber ponerla donde mejor va para la atención del espectador).
La película da para verla con amigos y luego estar debatiendo más tiempo del que dura la misma, así que con estos mimbres parco será el resumen que sigue. Un hombre despierta en un nivel de una construcción en forma de túnel vertical. Junto a él está un hombre mayor que le instruye de lo que hay allí. Al cabo de un rato baja una enorme plataforma llena de comida y el hombre mayor se pone a comer como un desesperado. Al joven no le apetece dada la vista de esa supuesta mesa. Esta desaparece a los cinco minutos yendo hacia un nivel inferior. Los espectadores y el recién llegado vamos aprendiendo que hay que comer cuando viene la plataforma y lo que nos hayan dejado los de los niveles superiores, tanto si te gusta como si no, tanto si tienes hambre como si no, pues tienes que aguantar un mes así… y luego irás a otro nivel que podrá ser más bajo o más alto. Según.






Dirección: Galder Gaztelu-Urrutia                                           Fotografía: Jon D. Domínguez
Guion: David Desola, Pedro Rivero
Montaje: Haritz Zubillaga, Elena Ruiz                                      Música: Aránzazu Calleja
Actores: Iván Massagué, Antonia San Juan, Zorion Eguileor, Emilio Buale
(2019; 94’; **; 14)


sábado, 11 de abril de 2020

CHERNOBYL


Hace ya un par de semanas que vimos, en tres sesiones, los cinco capítulos de esta serie que, obviamente, trata del accidente nuclear que ocurrió en la central del mismo nombre. Ya ha habido unos quince accidentes debidos a la energía nuclear, pero quizá los más conocidos e importantes sean los de Pensilvania, este que da título a la serie y el de Fukushima, siendo estos dos últimos los más importantes en magnitud.
La serie recrea la infausta noche en la que, fuera del horario previsto, se hizo una prueba en la central, con tal mala fortuna, que desencadenó una terrible explosión que dejó el núcleo del reactor a la vista. Los actores que aparecen representan a los verdaderos protagonistas, tanto del accidente, como de la investigación e intento de contención del daño, siendo muy plausibles sus caracterizaciones y actuación. La ciudad de Pripyat, creada para dar alojamiento a los trabajadores de la central, aparece tal y como fue vista en las imágenes de la época y en los títulos de crédito se indica que se ha rodado allí y en Moscú.
La central, tanto interna como externamente, es impresionante, por lo que he de creer que a través de fotos y filmaciones in situ se ha trabajado mucho con imágenes creadas por ordenador pero, en cualquier caso, todo es muy creíble.
Lo que es increíble es que “estos” por crear el artificio de que su sistema social, económico y científico estaba a la altura de los “otros”, hicieran lo mismo que estos últimos, es decir, una construcción como no se había prescrito, unos descubrimientos de fallos ocultos que no se comunican a los científicos y un sistema creado para tapar fallos en él de forma que todo siga como está intentando mantenerse en el poder tanto como sea posible, a todos los niveles, y sin importar ni los costes ni el daño social que se puedan producir. Lo importante es que todos los que no están dentro de la maquinaria del sistema, el propio pueblo y los demás países, crean que todo funciona bien y que es mejor que lo de los demás. El resto no importa: ni el pueblo ni los demás países.






Dirección: Johan Renk                                                          Fotografía: Jakob Ihre
Guion: Craig Mazin
Montaje: Jinx Godfrey, Simon Smith                                     Música: Hildur Gudnadóttir
Actores: Jared Harris, Stellan Skarsgard, Emily Watson, Jessie Buckley, Adam Nagaitis
(2019; 5 x 70’; ***; 13)